La suspensión de actividades por la emergencia sanitaria afectó al producción minera, pese a ello, no se registró ningún cierre de minas permanente declaró Francisco Quiroga, subsecretario de Minería.
Las minas tuvieron que paralizar faenas para cumplir las medidas de cuarentena a inicios de de abril. A fines de mayo, pudieron reanudar luego de que el sector fuera considerado actividad esencial.
En un análisis posterior, asegura Quiroga, los cierres permanentes parece que fueron evitados.
México tiene aproximadamente 220 minas en operación con una vida útil promedio de entre 11 y 15 años. El dato revela que se están abriendo activos permanentemente mientras otros se cierran, explicó el subsecretario en una conferencia.
«¿Alguna mina que yo sepa que por causa de COVID se haya cerrado y no haya vuelto? No. Sin embargo, sí hay una afectación», aclaró.
«Fueron 2 meses de inactividad, vamos a decir por falta de permisos de operar. A estos 2 meses hay que agregarles el hecho de que una mina no puede iniciarse de un día a otro.»
Además, agregó Quiroga, hay operaciones que necesitarán de 5 a 6 semanas para alcanzar la producción máxima.
Se ha autorizado la continuidad de las operaciones mineras durante la pandemia en algunos países latinoamericanos, como Chile, mientras que otros, como Brasil y Argentina únicamente aplicaron suspensiones breves o parciales.
Otras países como Ecuador y Perú han impuesto suspensiones más extensas y avanzan hoy con reanudaciones graduales.
Fuente: Bnamericas
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